Descubre el origen de la siesta
No se nos ocurre mejor manera de inaugurar nuestro Blog que dedicándole unas líneas a uno de los hábitos más antiguos y saludables: la historia y origen de la siesta.
Aunque algunos pretendan otorgarle a España el origen de ésta sana y necesaria costumbre sería un error, la siesta no es «Made in Spain», es una fantástica tradición igualmente practicada por otros muchos pueblos mediterráneos y de otros continentes.
El origen de la siesta data de la Antigua Roma y su división de los días en 12 horas. El comienzo de las horas dependía de la luz y de la época del año, por lo que las horas no se distribuían del mismo modo en verano que en invierno.
Dada la distribución del horario «la hora sexta» correspondía a la mitad del día, es decir, la hora central del día de luz y sin duda la más calurosa, motivo por el que fue la elegida por los romanos para hacer una pausa en sus obligaciones, dedicándola al reposo y descanso.
Más adelante será San Benito, monje y Abad benedictino ¡Patrón de Europa y Patrón de la siesta!, quien implante una regla que indicaba guardar reposo y silencio a «la hora sexta», norma que con el paso del tiempo será adoptada con gusto por el resto de los mortales y derivará en la actual tradición de hacer la siesta.
¿Imagina poder dormir la siesta en la oficina? ¡No es un sueño! Las grandes empresas conocedoras de sus beneficios y conscientes de que mejora la concentración e incrementa la productividad laboral, apuestan e invierten en espacios para éste fin.
Sobre la siesta y sus beneficios hay grandes estudios realizados y avalados por innumerables expertos, cardiólogos, especialistas en trastornos del sueño, investigadores de la NASA… pero sobre eso hablaremos otro día. Por el momento desde Evercasa le invitamos a cerrar los ojos, deje a un lado su dispositivo móvil, balancéese, déjese llevar por su Hamacon y… ¡Dulces sueños!
- Origen de la siesta - noviembre 15, 2015